Como bien lo dice el título, mirando las cosas desde otra perspectiva todo luce mucho mejor es cuestión de sentarte frente a ese espejo imaginario y verte a ti mismo, evaluar la situación y poner en la balanza las consecuencias de las dos caras de la moneda. Hace mucho tiempo les dejé por acá la historia de La Dra. Rompe Corazones, pero debo confesar que siempre he sido la Dra corazón de mis amigos; alguien está triste, despechado, deprimido? Ahí sale Vicky a darle consejos e intentar darle la mejor solución para evitar que sufra, aún y cuando las palabras sean tan fuertes que puedan llegar a odiarla por unos instantes. Pero que? Como bien dice el dicho "En casa de herrero....", para todos hay consejos, para todos hay solución, para todos está el tan popular "no vale la pena que estés así", pero resulta que cuando es la famosa y tan eficiente Dra. Corazón la que está mal, otro gallo es el que canta! Sus consejos valen un pepino, se echa a morir y lo peor del caso es que se lanza a tomar decisiones apresuradas que por supuesto no terminan nada bien.
Pero en esta oportunidad todo ha sido diferente, creo que los 27 que ya llevo a cuestas tienen mucho que ver en todo esto, de pronto hubo un momento de lucidez y el fulano espejo que al principio les comenté apareció y tuve la oportunidad de ver todo diferente. Con el pasar de los días y al estar concentrada en mí misma fue que pude darme cuenta de lo importante que es apartar un poco lo que sentimos para poder ver con claridad. Estando lejos de todo lo que pueda influir en tus decisiones, te das cuenta de mucho. Como por ejemplo; puedes caer en cuenta que cualquier cosa; hablo tanto de lo material como de las personas que están en tu entorno, son solo complementos de tu felicidad, que lo único importante en tu vida debe ser eso; TU FELICIDAD, si eres feliz con lo que haces, con como vives, con tus sueños, con tus planes a futuro incluso hasta con lo que te guste hacer para divertirte; todo, absolutamente todo lo demás no es sino un complemento de esa felicidad, mas nada. Las decisiones las debemos tomar pensando en primer, segundo y tercer lugar en nosotros mismos en lo que nos represente nuestra felicidad y no en lo que estemos sintiendo en el momento.
Es imposible no equivocarse, pero precisamente son esos pequeños errores los que nos hacen madurar y poder establecer esa tan importante prioridad antes de tomar cualquier decisión. Con
el pasar del tiempo he determinado que la vida no son mas que
experiencias, etapas, cosas que deben pasar para hacernos más fuertes y poder enfrentar lo que vendrá.
